El diseño gráfico minimalista: por qué nunca pasará de moda esta tendencia
El diseño gráfico minimalista ha adquirido en la actualidad su máxima expresión, siendo una de las tendencias de diseño gráfico que más van a verse este año. Esta tendencia de principios del siglo XX es complicada para muchos. Su estilo se centra en la funcionalidad y simplicidad, por lo que muchas marcas, como Google o Apple lo han adoptado como una de sus señas de identidad.
¿Qué es el diseño gráfico minimalista?
El arquitecto alemán Miles Van Der Rohe es uno de los que definen con mayor perfección el minimalismo. Para definirlo tan solo se necesitan tres palabras muy sencillas que grandes empresarios también han utilizado: menos es más.
Para las personas que no sepan muy bien de qué se está hablando, hay que decir que el concepto principal del minimalismo trata de colocar de forma estratégica los elementos y eliminar todos los excesos. Como resultado, se obtiene un diseño tan relajante como potente y completamente simplificado que podrá transmitir con precisión un mensaje. Esta tendencia puede encontrarse en todas las formas de expresión artística como la moda, la arquitectura o el diseño de logotipos corporativos.
Para obtener el mayor provecho de un diseño gráfico minimalista, ya sea en unas tarjetas de visita personalizadas o, por qué no, en un catálogo personalizado, estos deben tener los elementos correctos. La tipografía, el color, los gráficos, el diseño y el espacio en blanco son los ejes sobre los que girará nuestro diseño.
Opciones de colores minimalistas en diseño gráfico
La estrategia impera en las diferentes opciones de colores en el diseño gráfico y la cantidad de estos que se deben utilizar: normalmente su uso se reduce a la mínima expresión. Blanco, negro y gris son los colores con mayor poder y permiten que un diseño tenga un impacto impresionante.
Cualquier color será aceptado si se utiliza de la forma adecuada. Aunque hay que destacar que los que tienen mayor contraste se suelen utilizar juntos. Este es uno de los motivos por los que los diseñadores suelen escoger los colores primarios para sus diseños minimalistas.
Efectividad y coherencia
Estos diseños son desafiantes, ya que cada uno de los elementos trabajados es igualmente importante. Uno de los fines del diseño minimalista es que los espectadores puedan encontrar aquello que necesitan sin pensar mucho, o dicho de otra forma, que de un vistazo se puedan hacer una idea del significado del diseño. Por ejemplo en el diseño de un logo buscamos que a primera vista el espectador sea capaz de distinguir la marca y algunos rasgos identificativos de la misma, ya sea el sector al que se dedica o ciertos valores que quiere transmitir.
El espacio en blanco o espacio negativo
El denominado espacio negativo o en blanco da energía a los pequeños bits de información. A mayor espacio en vacío, más poder tiene el objeto que se sitúa en su interior. Este espacio nos ayuda para estructurar diferentes elementos y alcanzar un buen equilibrio.
La tipografía minimalista
La estrategia a seguir con la tipografía es tan fundamental como la de cualquier otro elemento. En cualquier estilo de diseño no se recomienda utilizar más de dos o tres tipos de fuentes. En muchos diseños se puede observar una fuente en los títulos, otra en el cuerpo y otra en textos especiales.
Contar con más de tres tipos de letra dará un aspecto caótico, desordenado y complejo de entender.
Logotipos minimalistas
Un logotipo minimalista busca ser recordado con facilidad y, por supuesto, ser asociado a los servicios de una empresa. El secreto de un logotipo de este tipo es que sea lo suficientemente sencillo y simple para que sea memorable.
Lo complicado, pero no imposible, es hacer un diseño reconocible y que refleje los objetivos y valores de una marca.
El diseño gráfico minimalista es una tendencia que no pasará de moda. Su simplicidad hace que se pueda incorporar en cualquier tendencia y estilo, por eso estará siempre presente en cualquier vertiente del diseño y, cada vez más, en elementos de marketing como folletos publicitarios o calendarios personalizados.
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